Verdades incómodas de la ciudad de Puyo

25.05.2022

Bañarse en el río Puyo es bañarse en un río lleno de desechos humanos y animales, aún así ha vista y paciencia de las autoridades todos los días en el Paseo Turístico se bañan los turistas que llegan a Puyo.

El río Puyo pasa por 10 parroquias: dos urbanas y ocho rurales, recibiendo las descargas de aguas residuales directamente en su caudal, causando un grave impacto ambiental.

El Dr. Roberto de la Torre ex alcalde de la ciudad y médico de profesión, en el año 2.009 en una entrevista, advirtió sobre las enfermedades a los que están expuestos quienes se bañen en el río Puyo.

El ex alcalde no dudo en ese año de calificar la contaminación del río Puyo como "grave", además de mencionar las enfermedades que podría causar bañarse en sus aguas contaminadas, entre ellas mencionó: gastroenteritis, salmonela, tifoidea, dermatomicosis en la piel, infecciones genitales en las mujeres.

En definitiva, concluyó que bañarse en el río Puyo equivalía a bañarse en un "caldo de cultivo de gérmenes patógenos", afirmó ese año que las aguas del río Puyo se convierten en una bomba de tiempo para la salud de sus habitantes.

Cuando fue alcalde no hizo nada para solucionar el problema que él mismo había advertido de grave, la situación no solo que no mejoró, sino que se volvió peor, la ciudad en su administración creció sin control, autorizando muchas lotizaciones y ampliando los límites de la ciudad.

Cuando fue alcalde recibió algunas propuestas de manejo ambiental para reducir la contaminación del río Puyo, todas fueron desechadas. Existen esos oficios para poder comprobar lo afirmado.

El alcalde Oswaldo Zúñiga ni siquiera intentó dar un paso para descontaminar el río Puyo, anunció que se invertiría dos millones de dólares en la remodelación del Paseo Turístico del río Puyo, en lugar de utilizar esos recursos en instalar una planta de tratamiento de aguas residuales, no hizo ni lo uno ni lo otro. Su administración estuvo plagado de irregularidades y de desatinos como haber remplazado árboles naturales por árboles metálicos en los parques y plazas de Puyo.

Doce años después de que el exalcalde Roberto de la Torre advirtió de las graves consecuencias de bañarse en el río Puyo aún siguen las aguas negras de una ciudad de más 30.000 habitantes descargando en el río Puyo.

Lo más grave del asunto es el prejuicio al que son sometidos miles de habitantes indígenas que viven a orillas del río Puyo, muchos de estos niños kichwas se bañan en sus aguas sin saber a los peligros que están expuestos, una verdadera violación a los derechos humanos y de la naturaleza y una flagrante violación a la constitución.

En el año 2016 Jefferson Rodríguez de la Universidad Nacional de Loja realizó una investigación sobre la calidad del agua del río Puyo frente al Malecón confirmándose que las aguas del río Puyo están contaminadas, en los valores de coliformes fecales estos superan los límites máximos permisibles para aguas de consumo humano, si el límite es 600 UFC/ 100 mL, el análisis determina que las aguas frente al malecón supera los 960 UFC7100 mL.

Hay que tomar en cuenta que varias administraciones municipales han ofrecido su descontaminación pero que lastimosamente hasta el día de hoy nada se ha hecho in situ para mejorar esta situación. 

La administración de Roberto de la Torre  invirtió la millonaria cifra de veinte millones de dólares en implementar el Plan maestro de alcantarillado que contemplaba la instalación de plantas de tratamiento de aguas servidas para terminar con la contaminación del río Puyo y Pindo, lamentablemente fue solo un plan maestro para la corrupción, hasta la fecha nadie sabe a dónde fue a parar tantos recursos.

El río Puyo cruza por un lado de la ciudad, lo que debería ser uno de los atractivos turísticos más importantes se ha convertido en una amenaza para la salud de sus habitantes y de turistas, quienes engañados llegan a bañarse ante la mirada impávida de sus autoridades, llevándose como recuerdo virus y enfermedades en su cuerpo.

Acciones urgentes sería señalizar a lo largo del río Puyo anuncios advirtiendo de los peligros inminentes de bañarse en sus aguas contaminadas.

No solo basta enseñar a la gente que sus mascotas deben ser llevadas con correas por el Paseo Turístico, o indicar la profundidad de sus aguas, hay que ser transparentes y decirles la verdad incómoda a quienes nos visitan con el objetivo de precautelar su salud.

Desde hace tiempo que venimos indicando que deben hacer los funcionarios y el líder máximo del GAD del Cantón Pastaza ojalá algún día alguien con sensatez, sensibilidad e inteligencia llegue a la Alcaldía y solucione este problema grave de contaminación en la cuenca del río Puyo.